viernes, 26 de febrero de 2016

¿Existe brecha salarial?



22 de Febrero, Día Internacional de la Igualdad Salarial. 

Constantemente oímos hablar de Igualdad Salarial, de Brecha Salarial, de Discriminación Salarial,… Pero… ¿qué significa eso? ¿Que todas las personas cobremos lo mismo independientemente de nuestra raza, sexo, religión o tarea que desempeñemos? No, en absoluto. Se refiere exclusivamente a la diferencia salarial que puede haber entre hombres y mujeres. ¿Qué diferencia salarial es esa? Pues eso ya no está tan claro. Las pocas veces que se concreta, se dice: “La diferencia salarial por el mismo trabajo”. Aunque cuando se dan cifras se hace tabla rasa y te sueltan el porcentaje superior que cobran los hombres con respecto a las mujeres, sin tener en cuenta las diferentes categorías profesionales. Resulta que hay más altos directivos y más futbolistas multimillonarios hombres que mujeres y así es fácil descuadrar los números. ¿Pero cuáles son los números? Los que tú quieras decir, da igual. Hemos entrado en el mundo de la Ideología de Género. En ese mundo todo vale. Nadie se va a atrever a llevarles la contraria, la represión puede ser terrible. 


Me parece evidente que todos (hombres y mujeres) debemos “cobrar lo mismo por el mismo trabajo”. Aunque lo entrecomillo porque realmente es una cuestión que habría que debatir en profundidad: ¿cobrar todos lo mismo en función del puesto e independientemente de tu capacidad, productividad, dedicación? Lo que está claro es que la distinción no puede ser en función de si eres hombre o mujer. Ahora bien, ¿cómo lo conseguimos? Primero tenemos que saber si existe tal brecha salarial. De ser cierta, a qué se debe. Y en función de esto, proponer y aplicar soluciones. 




¿Existe la brecha salarial?


Desde el momento en que cada organismo, organización, asociación, Instituto, partido político, sindicato,… da una cifra diferente, muy diferente, queda en entredicho. Más parecen cifras inventadas para satisfacer sus intereses que para informar de una realidad. “Mujeres para la Salud” dice que la brecha es del 19,3%, “Generando Ciudadanía” que del 22%, la UGT que del 24%, Pedro Sánchez un día te dice que es del 23%, otro que es del 28% y otro que del 30%, IU dice que es más del 30%. Lo de IU es previsible, a menudo dicen lo mismo que el PSOE, pero más.


Por otro lado, en “El Objetivo” de Ana Pastor, se hacía una comparativa por sectores y categoría profesional y resultaban muy parejos los salarios. Incluso ganaban un 1% más las mujeres en tareas de oficina. 


Por tanto, repito la pregunta: ¿existe la brecha salarial? ¿Es cierta alguna de las muchas y dispares cifras que sueltan alegremente unos y otras? De tanto repetirlo, para muchas, la brecha salarial se ha convertido en dogma de fe,  como pasa siempre con la propaganda oficial de cualquier dictadura donde nadie se atreve a cuestionar las doctrinas del régimen. No consentirán que les digas lo contrario y la defenderán con la agresividad y fe ciega del fanático, pero sin pruebas ni argumentos de peso, claro. Solamente con los clichés aprendidos.


Conclusión, no sabemos si existe esa brecha salarial.

¿A qué se debe la Brecha Salarial? 


Si existiese tal brecha salarial, habría que conocer los motivos para poderla corregir. Los partidos políticos y los sindicatos mayoritarios (que para el caso vienen a ser lo mismo) se limitan a la típica palabrería condenando la discriminación, asegurando que se posicionan firmemente contra ella, afirmando que la van a erradicar y aderezándolo con datos inventados o manipulados. ¿Causas reales de la supuesta brecha salarial? Ninguna. En su lugar aportan algún tópico del feminismo actual. 

Luego están las asociaciones que viven de la Industria de Género. Éstas a lo suyo: al victimismo, a satanizar a los hombres, a inventarse excusas y a engañarse a sí mismas. Así es imposible. Desde la ignorancia no se puede solucionar un problema complejo. Más aún, desde convicciones erróneas no se puede alcanzar soluciones correctas. Una de las excusas que utilizan éstas es que las mujeres se tienen que coger baja por maternidad. Vale, ¿y ese dato anecdótico que suele ocurrir una o dos veces en la vida es el causante de la brecha salarial en toda la sociedad? Con tal simplificación del complejo problema, proponen como solución obligar a los hombres a cogerse la misma baja por paternidad. Curiosamente, éstas son las mismas que se oponen a la Custodia Compartida. Algunas incluso dicen que la Custodia Compartida es Violencia de Género. Por tanto, condenan a la mujer a cuidar, cocinar, lavar, fregar,… para los niños mientras exoneran a los hombres de esas tareas. Esto que parece tan contradictorio y esperpéntico (y que lo es), cuadra perfectamente con la ideología del Feminismo de Género. Pero es que desde la ciega perspectiva del fanatismo no se puede analizar objetivamente los problemas ni, por tanto, encontrar soluciones.


En conclusión, nadie glosa las causas de la brecha salarial. Sin saber las causas, difícilmente pueden encontrar soluciones.

¿Qué soluciones aplicar?
 

No sé. No tengo ni idea. Primero tendríamos que conocer sus causas. Una salida fácil es preguntarle a quien sabe. Como los partidos políticos están siempre hablando de la brecha salarial y de acabar con ella, se supone que saben de lo que hablan. Les he preguntado a todos los principales partidos políticos pidiéndoles alguna solución concreta que pretendan implantar ellos. Pues ninguno me ha respondido. Con alguno he insistido bastante. Y los políticos a lo suyo: muchas palabras bonitas, muchas frases que suenan bien, mucho compromiso y solidaridad, muchas buenas intenciones,… pero ninguna solución. 

Como conozco el percal, les he hecho una pregunta muy clara y concreta. Y para inducir a una respuesta igual de clara y concreta les incluyo una posible solución a modo de ejemplo:
“¿Qué medidas concretas tomaría el partido xxxxx para acabar con la discriminación salarial? ¿Legislar igualdad salarial como a los funcionarios?”
 

Pues nada, que los partidos con declarar sus buenas intenciones ya tienen bastante.
Conclusión, nadie aporta ninguna solución. Tampoco los que dicen que van a acabar con esta discriminación salarial.

Pero entonces… ¿no hay brecha salarial?, por supuesto que hay brecha salarial, entre Europa y Africa, o entre Norteamérica y Sudamérica. Pero esa brecha salarial no parece importar a nadie. Que las mujeres (y hombres) de África cobren menos que los de Europa no parece importarles. Prescindiendo de los Derechos Humanos y de la Igualdad entre las personas, podríamos acotarlo a nuestro entorno. Más aún, sólo a España. Claro que hay brecha salarial en España, entre el norte y el sur. Pero esa brecha salarial tampoco parece importarle a nadie. Que las mujeres (y hombres) del sur cobren menos que los del norte no parece importarles. Se trata de diferentes CC. AA., diferentes reinos de taifas. Claro que hay brecha salarial dentro de una C.A., entre pueblos y ciudades. Pero esa brecha salarial tampoco parece importarle a nadie. Que las mujeres (y hombres) de los pueblos cobren menos que los de las ciudades no parece importarles. Aunque estaríamos hablando de diferentes ámbitos, el rural y el urbano. Claro que hay brecha salarial en una misma ciudad, entre funcionarios y trabajadores de la empresa privada. Pero esa brecha salarial no parece importarle a las asociaciones, ni a los sindicatos, ni a los políticos. Que las mujeres (y hombres) de la privada cobren menos y tengan peores horarios y peores condiciones laborales que los empleados públicos no parece importar a nadie. Pero es que son dos ámbitos diferentes: la pública y la privada. Claro que existe brecha salarial en las Administraciones Públicas, entre funcionarios, interinos, laborales, de contrata, de subcontrata,… Pero esta brecha salarial tampoco parece importar a nadie. Puestos a acabar con la brecha salarial, ésta sería por la que deberían empezar los políticos, puesto que el sueldo y las condiciones laborales de los empleados públicos las deciden los diferentes políticos cuando gobiernan. Ignorar la brecha salarial que provocan los políticos al tiempo que éstos mismos prometen acabar con otra que les es ajena sorprende y hasta enoja. Hablamos de ciudadanos con “iguales derechos”, con la misma titulación, desarrollando el mismo trabajo para la misma administración y en el mismo edificio. A unas les dan un sueldo y a otras bastante menos. A unas les regalan el comedor (o casi) y a otras les cobran el menú. A unas las tienen hasta mediodía (facilitando la conciliación familiar) y a otras las tienen hasta la noche (dificultándosela)… Esta desigualdad salarial y laboral es la que imponen, donde gobiernan, el PSOE, el PP, IU, PNV, CIU,… con la complicidad de los sindicatos UGT, CC.OO.,… El que estos políticos y sindicalistas adopten esa pose indignada y lancen esos discursos comprometidos y hagan promesas contra la desigualdad salarial cuando son ellos quienes la crean, fomentan y/o participan de ella, suena a hipocresía y desvergüenza.


El hecho de que los políticos estén constantemente hablando de la desigualdad salarial de las mujeres, creando y subvencionando asociaciones y organizaciones que transmiten y afianzan el credo y prometiendo acabar con dicha desigualdad e ignorando el resto de brechas salariales, da la sensación de que consideran más manejable al colectivo femenino para sacarles el voto con promesas que no piensan cumplir. Y el volver a presentarse a las elecciones con las mismas promesas contra la brecha salarial que han estado incumpliendo mientras gobernaban debería indignar a las mujeres como para no volverles a votar. Pero esta artimaña debe ser muy rentable para los partidos políticos, puesto que todos juegan a prometer eliminar la supuesta brecha salarial de las mujeres sin siquiera molestarse en pensar alguna medida efectiva. Aquello de “prometer hasta meter…”.


Así que, vamos a lo que vamos: ¿realmente existe la famosa brecha salarial entre hombres y mujeres en España? Pues hay que averiguarlo, porque si existe hay que acabar con ella y si no existe hay que acabar con la matraca. Seguro que los millones de empleados públicos no padecen esa discriminación salarial por sexos, ni los reponedores o cajeros de las cadenas de supermercados, ni los jornaleros,… Para alcanzar una diferencia salarial del 24% con los trabajadores y trabajadoras que quedan tiene que haber muchos con una gran diferencia salarial. Si eso fuese así tendría que ser muy evidente y resulta que todo el mundo habla de ello, pero nadie conoce ningún caso.  Pero la forma de averiguarlo es muy fácil, no tiene más que publicarlo quien lo sabe todo sobre los dineros de la gente: el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. Que publiquen una “vista” a todos los sueldos de todos los trabajadores permitiendo filtrar por tipo de trabajador (funcionario, laboral, de empresa privada), el cargo, la provincia, el sector, tipo de población (ciudad o pueblo), tipo de jornada,… Así podríamos realizar nuestras propias consultas de este modo:


Select Categoría, Jornada, Genero, AVG(Sueldo)
From Salarios
Group By Categoria, Jornada, Genero


Con esta consulta tan sencilla ya sabríamos el sueldo que tienen los hombres y las mujeres en cada tipo de jornada para cada categoría profesional y podríamos hacer una comparación real y objetiva.

Como los políticos han creado una gran sensibilización con este tema, es necesario que se publiquen los sueldos en función de la categoría, provincia, sector, sexo,… para saber si existen brechas salariales, en qué parte se producen y para poder solucionarlas. Es necesario que los políticos prediquen con el ejemplo, que acaben con la brecha salarial y con las otras desigualdades en las Administraciones Públicas. Es necesario que los políticos se centren en la resolución de los problemas de la ciudadanía y no en crear humo para pedir el voto prometiendo disiparlo. Es necesaria una regeneración democrática.

Algunos ejemplos de disparidades de cifras y de mucha palabrería y ninguna solución real:
Mujeres para la salud 

UGT
Junta de Andalucía
Generando Ciudadanía
PSOE